En muchas ocasiones, la hora de comprar juguetes a nuestros hijos, nos dejamos llevar por sus peticiones expresas o por lo que nos parece que les puede gustar sin más.
Esto es un error, ya que podemos terminar comprando un juguete que no sea adecuado para ellos.
En el post de hoy te contamos algunos de los errores que cometemos a la hora de comprar juguetes.
Hay que mirar siempre el etiquetado
A la hora de comprar cualquier juguete o juego, es importante leer el etiquetado para asegurarnos de que se adapta a nuestros hijos.
Hay que tener en cuenta la edad de uso recomendada, ya que puede que contenga piezas pequeñas que pueden ser peligrosas si nuestro hijo es demasiado pequeño, por ejemplo.
También nos informará de si el juguete necesita pilas o necesita ser cargado, datos que nos serán útiles a la hora de dárselo a los niños.
Hay que tener en cuenta los gustos de los niños
Debemos dejar atrás la idea de que hay unos juguetes de niña y otros de niño.
Los niños no entienden de separación de sexos y les puede gustar jugar con cualquier juguete.
Niñas que juegan con coches y niños con muñecas, no intentemos imponer costumbres que nada tienen que ver con la imaginación y el juego.
Por ello es bueno que les preguntemos o que les dejemos a elegir entre juguetes de todo tipo.
Además, de este modo les enseñamos que no hay roles establecidos y no fomentamos ningún tipo de discriminación.
En el equilibrio está el éxito
Ni es bueno comprar solo juguetes educativos ni solo comprar los típicos juguetes que lo hacen todo sin que los niños a penas tengan que intervenir.
Lo ideal es encontrar un equilibrio, los juguetes de carácter educativo son muy positivos para el desarrollo intelectual de los niños, pero también necesitan ratitos de desconectar y entretenerse con juguetes menos exigentes.
De igual modo, jugar con muñecas, con coches, a médicos, a comprar en el súper… es igual de necesario.
Los niños aprenden a desenvolverse socialmente a través del juego, por lo que una combinación de diferentes tipos de juguetes es imprescindible.
No dejarnos llevar por el precio más barato
Hay que ser cuidadoso con los sitios en donde compramos los juguetes. A menudo nos dejamos seducir por un precio más barato y terminamos comprando en tiendas no especializadas.
Esto puede suponer darles a nuestros hijos juguetes de mala calidad que no han pasado por los controles de calidad necesarios y que pueden poner en peligro su seguridad.
Juega con tus hijos
A menudo queremos que los juguetes sean sustitutos de nuestra presencia, es decir, que los niños se pongan a jugar y mientras nosotros poder descansar o realizar otras tareas.
Esto puede funcionar un ratito, pero no podemos pedir milagros, nuestros hijos querrán jugar con nosotros y compartir todos sus juguetes con nosotros.
Lo importante es que tus hijos se diviertan y disfruten de lo más bonito de ser niños: jugar.