Una de las batallas que libramos a diario los que tenemos niños es la de recoger los juguetes.
Estaréis conmigo que es una batalla que perdemos prácticamente siempre.
El conseguir que tras un rato de juegos, los juguetes se queden perfectamente recogidos es una tarea imposible.
Lo habitual de cualquier casa donde hay niños es encontrar muñecas, peluches, coches, juegos, balones, cuentos y un largo etcétera… esparcidos por cualquier rincón.
En el post de hoy os traemos algunas ideas para guardar y ordenar los juguetes de nuestros hijos.
Lo primero: hacer limpieza
Nuestros hijos reciben juguetes nuevos cada cierto tiempo, cumpleaños, buenas notas, Navidad… y poco a poco se van acumulando.
Lo primero que debemos de hacer es una limpieza de todos aquellos juguetes con los que ya no juegan o se han quedado obsoletos para su edad.
Es aconsejable que ellos nos ayuden en este proceso, puede que quieras deshacerte de algo a lo que ellos le tienen cierto aprecio y la cosa puede acabar en enfado.
Podemos enfocarlo de un modo positivo y darles un fin con el que se sentirán contentos, como por ejemplo, donarlos a niños que no tienen juguetes.
Cajas al poder
Es la manera más sencilla de poner orden, además hay multitud de opciones en cuanto a materiales y a tamaños, por lo que no será complicado encontrar cajas que se adapten a nuestras necesidades.
Para nuestros peques será muy fácil entender el orden a la hora de recoger sus juguetes, ya que podemos poner pegatinas en las cajas con el nombre de lo que va en esa caja.
O utilizar dibujos o colores, la cuestión es que cuando toque guardar sepan dónde tienen que colocar cada cosa.
El tipo de material además nos dará mucho juego en cuestiones decorativas, si las cajas son de colores las podemos combinar con los colores que predominen en el dormitorio o cuarto de los juguetes.
Otras formas de almacenaje
Aunque lo más socorrido son las cajas, también podemos utilizar otros elementos para guardar los juguetes.
Los cestos son otra gran solución, los hay también de diferentes formas y colores y son muy cómodos a la hora de sacar como a la de guardar.
Un baúl o un banco también nos aportarán ese espacio extra de almacenaje y además ganaremos un rinconcito el que nuestros hijos se pueden sentar a leer un cuento, por ejemplo.
Las estanterías son otras grandes aliadas, si son más estrechas las podemos utilizar para colocar los libros de pintar, los colores, los cuentos…
Si son algo más anchas podemos colocar los juegos de mesa y los peluches, a nuestros hijos les encantará ver a todos sus muñequitos colocados y ordenados.
Aprovecha cada rincón
A la hora de guardar todo e intentar que quede ordenado, hay que tirar de imaginación y aprovechar hasta el último rincón.
Un buen truco es aprovechar las puertas. Si en la habitación hay un armario, podemos colgar el típico organizador de zapatos y usarlo para guardar ahí muñecas, coches o accesorios más pequeños.
Colocar ganchos detrás de la puerta de la habitación también nos permitirá disponer de un espacio para colgar los disfraces o bolsas con juguetes.
Lo importante, además de intentar mantener un poco de orden, es que nuestros hijos se sientan cómodos y les resulte sencillo sacar y guardar sus juguetes.
Nos quedan unos años en los que nuestras casas no estarán perfectas y ordenadas, pero en los que nuestros hijos disfrutarán de horas de juegos y diversión, a disfrutadlos con ellos!!!
