El sedentarismo infantil es una de las causas de varios problemas de salud, entre ellos la obesidad.
Dentro de unos días acaba el cole y nuestros hijos van a disfrutar de un laaargo periodo de vacaciones.
Una de nuestras preocupaciones es que se relajen más de la cuenta y no realicen el ejercicio necesario. Sobre todo si son más mayorcitos puede que les apetezca pasarse las horas muertas viendo la tele o jugando a la consola.
Hoy os damos algunos tips para evitar el sedentarismo en nuestros hijos.
Las piscinas nuestras grandes aliadas
Con el calor que hace seguro que nuestros hijos no se resisten a buen baño en la piscina. Si tenemos en casa, perfecto y si no podemos hacer una excursión hasta alguna piscina municipal.
Si además nosotros nos bañamos y jugamos con ellos, nos lo pasaremos bomba mientras nos movemos y además nos refrescamos.
Verano es tiempo de deporte
Con la ajetreada rutina diaria y las extraescolares, seguro que hay algún deporte que a nuestros hijos les llama la atención y no han podido practicar por falta de tiempo.
Podemos buscar algún campamento deportivo que ofrezca el deporte elegido. El ejercicio físico los mantendrá activos y además se divertirán.
Anímate a dar paseos con tu hijo
Como mejor enseñamos es con el ejemplo. Si nosotros intentamos coger menos el coche y caminar más, seguro que nuestros hijos no protestarán cuando les propongamos que nos acompañen a comprar algo dando un paseo, por ejemplo.
También les podemos proponer dar un paseo por algún sitio que a ellos les guste.
Si nuestros hijos son más mayores o adolescentes, será además un buen momento para hablar y que nos cuenten aquello que les apetezca.
Promover actividades en familia
Podemos hacer planes en familia como salir en bici o a patinar juntos. Pasar un día en la playa es también muy buena opción.
Los peques no pararán quietos bañándose, haciendo castillos de arena, jugando a la pelota o con las raquetas de playa.
Cuanto menos pantallas, mejor
Está claro que es inevitable que jueguen a videojuegos o no vean la tele, pero debemos limitar su uso en la medida de lo posible.
Podemos establecer horarios y que no pasen más de X tiempo utilizando tecnología y que su uso esté equilibrado al resto de actividades.
Lo importante es encontrar un equilibrio entre el tiempo que estén jugando con pantallas y el que estén jugando y disfrutando de otras acatividades.
Nos queda un largo verano por delante y seguro que encontramos muchas actividades que compartir con nuestros hijos que eviten que se pasen todo el día en el sofá.
Además de evitar el sedentarismo de nuestros hijos, nos lo pasaremos en grande con ellos.
¡Feliz verano!